Magia de arena

Cielo dorado de unes mes de Abril,

alguna tormenta le acompaña...

Qué importa, 

ella, toca a su fin,

no conoce al invierno.

Cálido, como un almuerzo en el desierto.

Frío como una noche y su silencio,

pero mágico, 

tan mágico como su crecer en el tiempo.

Quien te conoció jamás supo hablar de tu inmensidad,

quien quiere conocerte aún teme tu misterio,

misterio de magia que entierra en oro mil silencios

que susurran tras sus dunas poemas de desierto.

Historias de beduinos que hicieron camino,

huellas de dromedarios que cambiaron por modernismo

hoy son la historia de hacia dónde dirigirnos.

Porque aquel que fue beduino siempre dio esa lección,

cambia y moderniza tu destino, 

pero nunca olvides el lugar que contigo nació.

Y tras todo, de nuevo silencio...
Un silencio que es roto con cautela,
por el baile elegante de tu arena.

Dunas de sabiduría

Me gustaba mirarlo y preguntarle todo lo que se escondía detrás de las dunas con las que pactaba su sueño que terminaría con un nuevo amanecer. 

Supongo que podría haberlo visto cada tarde en busca de una respuesta que jamás llegarían, porque el desierto es como un buen confidente que durante la noche todo lo tapa con sus granos de oro.

Entre dunas también descubrí lo que era el amor, me enseñaron que no era un lugar fijo, que es un lugar que se mueve por mucho que llegue al oasis.

También debo decirte que el desierto, no es lo mismo sin sol.

Sigue siendo el delicado manto arenoso que cubre el horizonte pero al que le falta su compañero de viaje que le otorga su esplendor.

Nunca tuve alma de beduino hasta que te conocí, 

Creo que todo el mundo debería conocer aquello que le impulse a cambiar su vida.

Tiene su lógica, no? La clave es ir migrando en busca del éxito, que como todo en la vida es temporal... Entonces, que me/nos hizo afincarnos? Llegamos al oasis?

Es curioso como un montón de arena en la cual se te pierde la vista puede hacer pensar tanto a una persona, por eso es momento de que experimentes lo que yo, y es que nada deja peor sabor de boca que las cosas que nunca llegas a probar..

Y es que hasta sobre una duna puedes aprender, que las verdades son viajeras, y que un oasis tan solo un espacio donde morir de mentiras esperando siempre el mismo amanecer que se apaga copiando cada atardecer.

(Dubai 2016)

Roberto López Martín