Todo fue silencio antes de volverse ruido,
Todo eran noches, hasta que se volvió día,
Todo eran sonrisas y risas cómplices antes de marcar una nueva despedida,
Todo, fue duro, hasta que a base de golpe lo hicimos blando,
Todo parecían años, hasta que se convertían en segundos,
Todo fue ir hasta que tu un día decidiste venir,
Todo siempre fue difícil, y cuando pudo ser fácil lo hicimos imposible.
Todo, siempre todo, y olvidamos que Todo nació de la Nada...
Y así fue lo nuestro, NADA,
Nada en el que nos dijimos de Todo,
Porque nada fue todo y todo nunca fue.
Roberto López Martín
No hay comentarios:
Publicar un comentario